Jorge Álvarez Camacho.- Lo siento, pero es que la vida es demasiado injusta. Claro que la muerte se llevó a un cantante inigualable, evidentemente hablo de Freddie, pero, ¿te has parado a pensar la cantidad de obras de arte de la música que nunca nacieron por su pérdida? 27 años sin el talento, ni la voz, ni la grandeza de Mercury.
Claro… él no está y tenemos que seguir escuchando canciones como las de Bad Bunny, y ya verás que él tendrá una vida larga. Morirá a los 100 años ¡Pa’ que te jodas!
Yo creo que la vida es irónica. ¿Te gusta Freddie? Pues me lo llevo. ¿No te gusta Bad Bunny? Pues ahora lo vas a oir hasta en la sopa.
Seguro que te ha pasado. Te gusta una chica. La viste en una cafetería y ya nunca más la volviste a ver. Regresas una y otra vez al mismo sitio, pero ya ella nunca más regresó a ese lugar. Pero… ¿Dónde se ha metido esa mujer? ¿No ha vuelto a tener hambre o que pasa?
Yo he llegado a pensar que esa mujer no existe. Otra broma del destino. La creó un día para luego reírse de ti.
Sin embargo, ¿qué ocurre cuando alguien te cae mal y no lo quieres volver a ver? Por mucho que intentes esconderte, te lo encuentras en la cafetería, en el supermercado, en el cine… incluso, sales del país y te lo encuentras: “Oh, que sorpresa verte aquí. ¡Que casualidad! ¿Verdad? Sí… una putada.
Pues lo dicho. Me parece también una putada que Freddie no esté. Cada vez que veo a David Bustamante en televisión miro al cielo y le digo a Dios: “¿En serio? Te llevaste a Mercury y nos dejas esto. ¿Tan mal te caemos?”
Ah y ¡no te lo pierdas! Que ahora saldrán los defensores de Bad Bunny y de Bustamante. Yo hablando de Picasso y ellos hablando de dibujantes de cómic. Perdonen, pero no es lo mismo. Como todo en la vida hay niveles.
Y de la misma manera, podría hablar de otros cantantes como John Lennon. Mira que hay gente ¿y matas a Lennon? Dispárate tú a ti mismo, si quieres, pero no nos hagas esto más.
Sin Mercury, sin Lennon… pero no te preocupes… que no hay mal que por bien no venga.
En sustitución… tenemos a Ozuna que nos hace olvidar a los grandes de la historia.
¿Elvis Presley? Quién es ese. A mi háblame de J. Balvin o Maluma que, aunque no quieras, terminas tarareando sus canciones porque las ponen en todas las radios, en todas las televisiones para asegurarte de que te guste, quieras o no.
Ya sé que estos cantantes de moda no tienen la culpa. Sólo los utilizo para descargar mi rabia, mi dolor por la ausencia de Mercury.
Vivimos en unos tiempos en los que no hace falta saber cantar para cantar. Como sigamos así, empezará a pilotar aviones cualquiera que lo quiera intentar. ¡Como aquí todo vale!
Jorge Álvarez Camacho – Escritor y conferencista internacional
