El 1 de marzo de 1971, el bajista John Deacon entró en Queen y comenzó desde entonces la legendaria leyenda de la banda.
En 1971, Queen aún no era la banda legendaria que conquistaría el mundo. Freddie Mercury, Brian May y Roger Taylor habían pasado por varios bajistas sin encontrar al indicado. Sin embargo, todo cambió cuando un joven tímido pero talentoso llamado John Deacon audicionó para la banda y se convirtió en la pieza que faltaba en el engranaje de Queen.
John Richard Deacon, nacido el 19 de agosto de 1951 en Leicester, Inglaterra, era un músico discreto pero con un gran oído para la armonía y una habilidad excepcional en el bajo. A diferencia de los bajistas anteriores que habían pasado por la banda, Deacon no solo tenía un estilo limpio y preciso, sino que también era un ingeniero electrónico aficionado, lo que más tarde ayudaría a Queen a desarrollar su sonido característico.
Cuando Deacon audicionó para Queen en 1971, impresionó a May, Mercury y Taylor con su técnica sobria y su actitud reservada. No solo tocaba bien, sino que también tenía una personalidad tranquila que contrastaba con el carisma de Mercury y la energía de Taylor. Esto lo convirtió en el complemento perfecto para la banda. Apenas unas semanas después de su llegada, Queen comenzó a ensayar con una nueva química musical que los llevaría al estrellato.
Su primera gran prueba llegó en 1973, cuando grabaron su álbum debut, Queen. Aunque el disco no tuvo un éxito inmediato, sirvió para definir el sonido de la banda. Pero sería en los años siguientes cuando Deacon demostraría su verdadero impacto. Como compositor, escribió algunos de los mayores éxitos de Queen, incluyendo You’re My Best Friend y Another One Bites the Dust, esta última convertida en un himno del funk-rock en 1980.
Además de su talento en el bajo, Deacon también fue clave en la parte técnica del grupo. Su conocimiento en electrónica lo llevó a diseñar equipos de sonido que mejoraron las presentaciones en vivo de Queen. Su discreción fuera del escenario contrastaba con la extravagancia de sus compañeros, pero su influencia en el sonido de la banda fue innegable.
John Deacon permaneció con Queen hasta 1997, cuando decidió retirarse tras la muerte de Freddie Mercury. Aunque ya no está activo en la música, su legado sigue vivo en las canciones que ayudó a crear. Su llegada en 1971 no solo cambió la historia de Queen, sino que también ayudó a definir el sonido de una de las bandas más icónicas del rock.
