El 6 de abril de 1981, el legendario batería de Queen, Roger Taylor, lanza su primer álbum en solitario ‘Fun In Space’.
Como tercer compositor más importante de un cuarteto de excelentes compositores, no sorprende que Roger Taylor persiguiese una carrera solista con tanta rapidez y determinación. Fue el primero en lanzar un single en solitario con ‘I Wanna Testify’, y como lado B ‘Turn On The TV’, en el verano de 1977. Estaba dispuesto a explorar los límites de su habilidades de composición. Durante las sesiones de ‘Jazz’ en el verano de 1978, Roger empezó a grabar ideas para un disco. Al final se materializaría en abril de 1981, después de tres años de trabajo discontinuo.
Tal y como funcionan los discos debut, Fun In Space es curioso. La mayoría de estrellas de rock con el estatus de Roger habría contratado muchos músicos invitados para una gran sesión de grabación. Así resultaría un álbum que más divertido de hacer que de escuchar. Por suerte, Fun In Space es tan solista como la propia definición. Roger tocó todos los instrumentos (aparte de la mitad de los arreglos de sintetizador), cantó, escribió y arregló todas las canciones el mismo. Probó ser bueno tocando varios instrumentos y capaz de cantar en un álbum entero.
Canciones
Las canciones que forman el álbum no eran de forma necesaria las que había descartado Queen. Aunque Roger señaló en una entrevista que The Game casi fue un doble álbum, con todas las canciones presentadas (pero seguramente no grabadas) durante ese periodo. Así que parece que algunas de las canciones que acabaron en Fun In Space se intentaron en The Game.
Muchas veces Freddie mencionó ‘Magic Is Loose’ como una canción del álbum que le gustaba bastante y que incluso cantaba de vez en cuando. Las dos épicas en el álbum, ‘My Country I & II’ y la pista de título, podría ser cualquier ambiciosa pieza escrita por Freddie o Brian en los comienzos de su carrera. El álbum contiene su justa medida de temas rockeros, e incluso una extraña balada como es ‘Laugh Or Cry’. También se añadió un poco de la ciencia ficción de Flash Gordon en el segundo lado en ‘Interlude In Constantinople’.
Lanzamiento
El álbum se lanzó durante un periodo de cambios en la carrera de Queen. La banda acababa de completar su primera gira por Ámerica del Sur, y estaban a punto de tomarse un breve descanso de la carretera. Querían trabajar en el álbum que siguiera a The Game.
A ‘Fun In Space’ le precedió el single ‘Future Management’, por dos semanas, que fue bien recibido de forma relativa e incluso entró en las listas británicas en el puesto cuarenta y nueve. Los singles que le continuaron, ‘My Country’ en el Reino Unido y ‘Let’s Get Crazy’ en Estados Unidos, no fueron de tanto éxito. Pero la experiencia en conjunto le dejó a Roger buen sabor de boca. Aunque siempre declaró, así como los demás, que Queen era su prioridad, Roger estaba más que contento de zambullirse en un estudio para grabar alguna canción cuando Queen estaba inactivo.
«En el pasado, he escrito tantas canciones que era imposible ponerlas en un álbum de Queen. Así que un álbum en solitario era la única posibilidad. Había ciertas cosas que quería hacer que no estaban dentro del formato Queen; en cierto modo, es como purgar tu sistema, y hasta que no lo hayas hecho simplemente no te sientes satisfecho. Si se me ocurren más ideas para las canciones, podría hacer otra cosa en solitario, pero Queen siempre tendrá prioridad», declaró el batería.
