Queen lanzó al mercado tres recopilatorios de Grandes Éxitos. El tercero vio la luz en 1999 y sin duda resultó el más polémico.
En 1981 Queen publicaba el primero de ellos –Greatest Hits– para recoger los mejores temas de la banda entre 1973 y el propio 1981. Hoy es uno de los discos más vendidos de la historia, con alrededor de 25 millones de copias repartidas por todo el mundo, y el más vendido en la historia en Reino Unido con unas ventas aproximadas de 6,1 millones de ejemplares (el único LP que ha vendido en las islas más de seis millones de copias). Suma más de 20 discos de platino. Originalmente alcanzó el número 1 en Reino Unido, donde permaneció 492 semanas en listas, y el número 14 en EE.UU., donde se mantuvo 26 semanas.
Diez años más tarde, y tan solo unas semanas antes de la muerte de Freddie Mercury, Queen publicaba el recopilatorio Greatest Hits II. Las ventas de este disco acumulan más de 20 millones de copias actualmente (junto a su versión para norteamérica, Classic Queen), alcanzando en aquel 1991 el número 1 en Reino Unido y permaneciendo 26 semanas en listas.
Cuando la desaparición del carismático Mercury hacía presagiar el cierre por completo de esta colección de grandes canciones de Queen, en 1999 la banda se aventuraba a publicar la tercera entrega, el Queen+: Greatest Hits III.
Puede que impulsados por el éxito del álbum póstumo, Made In Heaven, o por las sinergias creadas en el estudio de grabación con el single-homenaje No-One But You, lo cierto es que este tercer recopilatorio no dejaba de ser una apuesta arriesgada, teniendo en cuenta que la actividad real de la banda fue limitada durante los años precedentes y que la sombra de Mercury (su ausencia), era muy alargada.
Un afán de permanecer en el candelero o una cuestión simplemente económica pudieron ser factores que motivaron también esta publicación. ¿Necesario o prescindible? ¿Un buen epílogo o una pifia? ¿Una pieza de coleccionista o tan solo un buen regalo navideño? Los gustos personales y la perspectiva del tiempo decantan la balanza en uno u otro sentido, pero he aquí mis consideraciones personales sobre el disco y sus canciones:
Varias de las composiciones del Made In Heaven merecían la etiqueta de “grandes éxitos”. El Queen+ recoge hasta cuatro de las canciones del disco póstumo: Too Much Love To Kill You, You Don’t Fool Me, Heaven for Everyone y Let Me Live. Sin embargo, tal vez la proximidad de fechas entre uno y otro disco (1995–1999) pudieran dejar la sensación al fan de aquel momento de estar adquiriendo más de lo mismo…
Un remix hecho para la ocasión. ¿Era necesario incluir en el álbum un remix de la mítica Under Pressure para darle un toque actual? No siempre las revisiones fueron buena idea y, aunque esta mezcla suena bastante bien, no es a mi juicio del estilo Queen en sentido estricto. Tiene toda la pinta de haber sido un producto expresamente hecho para el álbum.
Aciertos y errores con las canciones personales de Mercury. En el álbum aparecen trabajos personales de Freddie. Barcelona (junto a Montserrat Caballé) es todo un himno (de las Olimpiadas de Barcelona’ 92 para ser exactos); una auténtica joya y un justo homenaje al genio de Zanzíbar. Inclusión en mi opinión necesaria y acertada. La canción fue número 8 en Reino Unido en 1987 y número 2 nuevamente en 1992 con motivo de los Juegos.
Se sabía que Freddie trabajaba en un álbum de versiones. De ellas alcanzó gran notoriedad su Great Pretender (4ª posición en la UK Singles Chart). Tema magnífico que si se llega a leer entre líneas puede tener un mensaje más allá del aparente: “Soy el gran farsante / Pretendiendo que lo estoy llevando bien […] Estoy solo pero nadie se da cuenta…”. (*Mercury ya conocía su estado de salud por aquellos días).
La otra cara de la moneda la encontramos, en mi opinión, con Living On My Own. Y es que no debemos engañarnos. La versión que realmente triunfó fue la de No More Brothers Mix, de 1993. Todo un rompe pistas que ganó además un Brit Award a título póstumo. El remix incluido en el Greatest Hits III (de un tal Julian Raymond) creo que no está a la altura.
Viejos temas no incluidos en los anteriores Greatest Hits. En este caso volverán a ver opiniones para todos los gustos. ¿Merecían ciertas canciones que no se incluyeron en el Greatest Hits I y II formar parte de la tercera edición? Repasémoslas…
En unos años en los que se vivía un auge de lo latino, alguien del entorno de Queen pensó que Las Palabras de Amor (Hot Space, 1982) debía incluirse en el recopilatorio. La canción no es mala pero ciertamente parece desubicada…
La serie televisiva de los 90 “Los Inmortales” dio renovada popularidad al tema Princes of The Universe (de la banda sonora de la película). Una canción de corte heavy que ciertamente es muy recordada.
Thank’s Gods It’s Chritsmas (1984) no llegó aparecer en ningún álbum de estudio ni recopilatorio de Queen hasta ese momento. Pieza única en el repertorio de la banda, por ser su único tema navideño. Buen tema.
Sentimiento en estado puro. Dos de las últimas canciones del álbum desprenden emotividad, el recuerdo a Mercury. These Are The Days of Our Live y No-One But You son ciertamente dos temas imprescindibles de Queen. El primero apareció en el disco Innuendo y sobrecoge por ser una delicada pieza que Freddie interpretó a las mil maravillas cuando ya estaba gravemente enfermo. La segunda (1997) es conocida popularmente como la “última canción de Queen”. No en vano, tras su grabación, John Deacon se retiró. Alcanzó el puesto 13 en Reino Unido y su mensaje, contundente: Nadie excepto tú (Sólo los buenos mueren jóvenes).
Dos célebres directos. El álbum incluye dos actuaciones en directo con otros dos mitos británicos. En 1992 George Michael interpretaba junto a la banda Somebody to Love en el concierto tributo de Wembley y hacía disparar los rumores sobre una posible sustitución de Freddie. No fue así, pero la canción -y sus falsetes- siguen siendo hoy día de lo más recordado de aquel mágico concierto.
Por su parte, Elton John apertura el disco con una decente interpretación en directo de The Show Must Go On, en abril de 1997, con motivo de la ceremonia inaugural de la obra Ballet for Life en París. Segunda ocasión en la que el cantante interpreta el tema junto a Queen tras el concierto homenaje de Wembley. También fue la última actuación con la banda de John Deacon. ¿Suficiente como para incluirla en un Grandes Éxitos?
El único éxito en solitario de Brian May. Driven by You no suena mal, pero a mi modesto entender, no llega a tener los suficientes “condimentos” como para incluirla en un disco recopilatorio de Queen. Ya se sabe, para gustos colores…
¿A quién se le ocurrió esto? La necesidad de llegar a más gente y de estar en primera línea creo que motivaron que esta remezcla de Wyclef Jean –Another One Bites the Dust (Small Soldiers Remix)-, apareciera en el recopilatorio. ¿Quién se acuerda de ella hoy en día? No es rock. No es Queen. Para mí, su inclusión es un despropósito.
Artículo por Alejandro Arbelo para A Queen Of Magic.