Después de que Bohemian Rhapsody haya ganado cuatro Oscars, incluyendo Mejor Actor a Rami Malek.
La película centrada en la historia de la banda Queen y su inigualable frontman Freddie Mercury cautivó al público de todo el mundo y excedió hasta las expectativas más optimistas de sus productores e inversores, con una taquilla que casi alcanzó los 900 millones a nivel mundial.
Un éxito casi tan contundente como el de la banda que retrata, que además vio resurgida su popularidad y la de su música.
Y de la mano del éxito siempre llegan las peores decisiones. En este caso: la de una secuela. Aunque por ahora son apenas rumores.
Según la publicación Page Six, Rudi Dolezal, quien dirigió varios de los videos musicales de Queen y fue amigo personal de Freddie Mercury en sus últimos años, ha dicho que la banda está «considerando fuertemente» la posibilidad de una secuela de Bohemian Rhapsody.
Es evidente que deben estar fascinados con la película y todo lo que ha significado, y quieran volver a experimentar algo similar, pero sencillamente no hay argumento posible para una secuela.
«Estoy seguro que Beach planea una secuela que comience con el Live Aid», dijo Dolezal.
Bohemian Rhapsody se abstiene de mostrar los últimos años y la muerte de Freddie Mercury, pero el triste final del cantante de la banda es una sombra que se cierne sobre toda la película y aparece en el final para dar cierre a la historia.
La banda son esencialmente los dos miembros fundadores que fueron productores en la película, Brian May y Roger Taylor, y el legendario manager Jim Beach.
Digamos que podría centrarse en esos pocos años que no cubrió Bohemian Rhapsody, desde el concierto Live Aid hasta la muerte de Freddie, pero no sería una historia demasiado atractiva. Sería incluso bastante sombría, y, para el público, como ver el mismo final otra vez. Como asistir por segunda vez al mismo funeral.
Incluso Bohemian Rhapsody, en uno de los grandes cambios que realizó a la historia real, adelantó el diagnóstico de VIH de Freddie Mercury para antes del recital Live Aid (en realidad él no sabía de su enfermedad durante ese histórico concierto), para darle ese peso final y definitivo al cierre.
Comenzar una nueva historia a partir de esto suena irracional, pero quizá no tanto si se piensa en los millones de la taquilla.
Aparentemente Brian May ya había deslizado la idea de una posible secuela en una entrevista. «El concierto Live Aid parece un buen momento de la historia para terminar la película» dijo May, «y quién sabe, quizá se pueda continuar con una secuela».
Si se hace la secuela, no se puede decir que Queen no haya respetado su famoso lema: «El show debe continuar».
