El «Pikes Hotel» alcanzó mucha popularidad en los años 80, siendo calificado de lugar «hedonista» para ricos y famosos.
ABC.- «Pensamos que deberías saberlo: Tony está en el hospital de Ibiza con neumonía. Aunque no está muy bien, sigue de buen humor, como siempre, pero necesita más amor y más amigos».
Es el mensaje que lanzaba una cuenta de Facebook relacionada con Tony Pike el pasado 23 de febrero. Un día después, fallecía a los 85 años tras una lucha contra el cáncer «para ser el espíritu libre que siempre ha sido».
Los propietarios de «Pikes Ibiza», el hotel que Anthony Pike bautizó como «Pikes Hotel» en 1978, confirmaban la noticia. «Es el fin de una era. Tony formó parte de una generación de personajes, pioneros y aventureros que llegaron a Ibiza hace más de 40 años. Nos aseguraremos de que los sueños de Tony y su increíble legado perduren».
Pike, nacido en el Reino Unido, convirtió una mansión de piedra en un hotel al noreste de la ciudad de Sant Antoni de Portmany, Ibiza. Según el DJ Paul Oakenfold, «Tony creó el concepto de ‘hotel boutique’»: exclusivo, en un entorno privado y con pocas habitaciones.
El «Pikes Hotel» alcanzó mucha popularidad en los años 80, siendo calificado de lugar «hedonista» para ricos y famosos. Fue el lugar de grabación del videoclip de «Club Tropicana» en 1983, una canción del dúo británico «Wham!», escrita por George Michael y Andrew Ridgeley.
Cuentan que propio Tony Pike se jactaba de haberse acostado con George Michael. La fama del hotel aumentaba año a año, pero fue en 1987, cuando Freddie Mercury lo escogió como sede de la fiesta de su cumpleaños número 41, cuando el «Pikes Hotel» alcanzó un rango de leyenda.
El exceso de Mercury
La fiesta de Mercury, cantante de Queen, fue descrita como «el ejemplo más increíble de exceso que la isla mediterránea había visto». La lista de invitados famosos superó las 500 personas, incluyendo, entre otros, a Julio Iglesias, Jean-Claude Van Damme, Kylie Minogue, Bon Jovi, Boy George, Tony Curtis, Naomi Campbell y la banda «Spandau Ballet».
Años después, los detalles de la fiesta siguen en la memoria de quienes la vivieron. Lo que trascendió a los medios fueron algunas pinceladas, como los miles de globos de helio dorados y negros que ‘inundaban’ el hotel, las 350 botellas de champán Moet & Chandon que se descorcharon, una gran exhibición de fuegos artificiales al final que pudo verse en toda la isla y un pastel con la forma de la «Sagrada Familia» de Gaudí, que se derrumbó y fue reemplazado por otro, de unos dos metros de largo, con las notas de la canción «Barcelona”».
El ocaso llegó en la década de los 90. Pike puso en venta su hotel en 1998. Durante las negociaciones, su hijo Anthony Dale Pike fue asesinado en Miami «por personas que intentaban tomar el control del hotel», según la policía.
El hotel finalmente se vendió en 2008 y Pike pasó a residir de forma permanente en él, en la habitación 25. El año pasado, una campaña de crowdfunding trató de reunir dinero para su tratamiento. «Tengo 84 años y tengo cáncer de próstata y cáncer de piel».
Amigos y familiares acompañaron a Tony en sus últimos meses. Ahora, el hotel «Pikes Ibiza» informa de que se tomará su tiempo «para reflexionar y decidir cómo celebrar la vida de Tony», al que el cantante Boy George definió como «el verdadero Hugh Hefner».