‘Bohemian Rhapsody’ revive la leyenda de Freddie Mercury

Freddie Mercury Rami Malek Bohemian Rhapsody

RTVE.es entrevista en Londres a Rami Malek, que encarna a Mercury, y al resto del equipo de la película.

Por ANA BELÉN GARCÍA FLORES (Londres).- Concierto solidario Live Aid. 1985. La incendiaria actuación de Queen ante 75.000 personas en Wembley, con un Mercury ya enfermo de sida, está valorada como una de las mejores de todos los tiempos.

Con este momento épico, que certificó el reinado de la banda en la escena musical de los 80, alcanza su cúlmen Bohemian Rhapsody el esperadísimo y primer biopic sobre la leyenda de Freddie Mercury, que bucea en el origen de Queen.

La película aterriza en los cines españoles este 31 de octubre tras un camino sembrado de turbulencias: el guion dio vueltas durante una década, y el director Bryan Singer fue despedido por “reiteradas ausencias” y enfrentamientos con los actores poco antes de que finalizara el rodaje (aunque luego fue recuperado para los créditos). El proyecto avanzó envuelto en continuos rumores de casting que apuntaban insistentes a Sacha Baron Cohen como protagonista.

Finalmente, Rami Malek, ganador de un Emmy por su siniestro hacker de la serie televisiva Mr Robot, fue el elegido para la gloria. El actor confiesa que sintió vértigo al encarnar a uno de los mayores mitos del rock pero no pudo resistirse a lanzarse al “papel de su vida”. Completan el reparto: Gwilym Lee que interpreta al guitarrista Brian May, Ben Hardy como el batería Roger Taylor y Joe Mazzello en el rol del bajista John Deacon.

 Freddie Mercury Rami Malek
Malek visionó decenas de actuaciones de Mercury y trabajó con una coreógrafa para captar sus movimientos FOTO: ALEX BAILEY

Malek, de 37 años, no quiso imitar lo inimitable y optó por interiorizar quién fue Freddie Mercury y lo que representó en una inmersión total. Las quinielas ya le sitúan como candidato seguro al Oscar.

El intérprete estadounidense de origen egipcio se empapó de decenas de actuaciones y entrevistas.Trabajó con una coreógrafa para captar los peculiares movimientos de showman sobre el escenario, ya que el líder de Queen practicó boxeo y tenis de mesa en su juventud.

Merece mención aparte en el anecdotario la prótesis dental que lució Rami Malek durante meses y con la que ensayaba a diario ante el espejo. Mercury fue apodado de niño “el dentón” y estaba acomplejado por ello, pero acabó convirtiendo su prominente dentadura -que según él  aumentaba su capacidad vocal-en una de sus señas de identidad.

El protagonista de Mr. Robot halló la conexión en “leer las letras de sus canciones porque son poesía que venía directamente de su alma” y porque transmiten “emociones universales que conectan con todo el mundo”, afirma, en esta aproximación a la compleja personalidad del jefe del grupo que sentía pasión por Liza Minnelli y los gatos. Freddie Mercury acabó erigiéndose en icono en una pintoresca historia de excesos y mucha y buena música.

“Creo que él intentaba saber quién era. Un joven inmigrante que empieza su vida en Londres con 18 años procedente de India, intentando descubrir su sexualidad. Todo lo duro que vivía en su interior solo era capaz de expresarlo en el escenario. Sólo allí era capaz de ser él mismo. Él se veía reflejado en todos los seres humanos con problemas que se sentían tan solos como él”, asegura el actor en una entrevista para RTVE.es durante la presentación mundial del filme en Londres.

Estreno mundial de Bohemian Rhapsody en Londres
Rami Malek (c) posa con los miembros de Queen Roger Taylor (d) y Brian May (i) en el estreno mundial de ‘Bohemian Rhapsody’ en Londres EFE FACUNDO ARRIZABALAGA

Aunque la principal y privilegiada fuente de información del equipo han sido los miembros originales de Queen Brian May-principal impulsor de la cinta- y Roger Taylor, que han ejercido de asesores creativos y productores: “Roger nos contó cuánto quería a Freddie y lo unido que estaba a él. Decía que era muy perspicaz y auténtico y cómo sabía lo que sentía cada persona en cada momento”, cuentan con emoción los jóvenes actores que se declaran fans de la música de la banda.

De Farrokh Bulsara a Freddie Mercury

Lo inicios del talentoso artista no fueron fáciles. Nació en Zanzíbar (Tanzania) y pasó parte de su infancia en la India de donde era originaria su familia de creencias tradicionales. En 1963 se exiliaron a Reino Unido por la situación política.

El rebelde adolescente, cuyo verdadero nombre era Farrokh Bulsara que pronto cambió por el más comercial y pronunciable Freddie Mercury,  se imbuyó en la escena glam londinense donde ya epataba con sus looks ajustados y sus uñas pintadas de negro. La música le sirvió de catársis y escapatoria.

La película muestra con amabilidad en la línea de una “feel good movie” para todos los públicos, cómo se conocieron los miembros de la banda, que en un principio se llamó Smile y que el propio Mercury bautizó como Queen porque quería representar a unos dandis descarados. El guitarrista y astrofísico Brian May encarnaba la parte más rockera mientras que el cantante sumaba una visión más lírica. La base rítmica de la batería de Taylor y el bajo del introvertido Deacon sellaron el resto en su ascenso al Olimpo.

La película muestra de forma amable cómo se conocieron los miembros de la banda FOTO: ALEX BAILEY

“Una de las claves del éxito era tener de líder a este hombre tan increíble que era capaz de doce registros vocales diferentes. Podía cantar absolutamente todo. Luego tenías a estos cuatro tipos componiendo con sus influencias musicales desde el funky al jazz al rock duro y al juntarlo todo crearon un tipo de música que antes nadie había escuchado”, explica Joseph Mazzello que interpreta a John Deacon.

Mazzello (Parque jurásico), que aprendió a tocar el bajo en tres meses y ensayaba cada día, relata como Deacon se apartó de la trayectoria de Queen tras la muerte de Mercury, “le respetaba mucho y quedó devastado”.

La composición de temas míticos

El filme mezcla en su parte musical la voz de Rami Malek, grabaciones originales y la aportación del canadiense Marc Martel con una entonación calcada a la del británico. Nos muestran la composición de temas que son himnos como “We will rock you”, “Radio Gaga”, “Another One Bites the Dust,” y sobre todo, “Bohemian Rhapsody” (1975).

Una pieza maestra que mezcla balada, rock y un característico coro de ópera que solo realizaron los cuatro integrantes de la banda, eso sí, grabando sus voces una y otra vez en casi 200 tomas y con la tecnología de los 70.

Esta locura genial, que emergió de la imaginación de Mercury, les aportó el espaldarazo definitivo aunque paradójicamente algunos ejecutivos discográficos rechazaron “Bohemian” por su larga duración de seis minutos.

“Creo que esa es la clave de la longevidad de su carrera porque hay bandas que hacen solo una cosa y es genial pero fueron capaces de evolucionar a través de la experimentación y captar la atención de todo tipo de personas”, añade Ben Hardy (The woman in white) que encarna al batería y se presentó al casting sin tener ni idea del instrumento por lo que inició un entrenamiento expres supervisado por Taylor.

El conjunto músical vendió millones de discos, en un grupo que siempre se comportó como una familia y en el que todos participaban en el proceso creativo y hacían participar a su vez a su “súbditos” en sus canciones, aunque comenzaron a distanciarse en la etapa de desmadre de su capitán.“Estaban muy unidos incluso cuando May hacía un solo sobre el escenario [Mercury] le daba todo el protagonismo”, dice Hardy.

La banda se distanció durante la época de excesos de Mercury ALEX BAILEY

Bohemian Rhapsody pasa de puntillas por el calvario del sida que tras intensos rumores, el cantante anunció públicamente en un comunicado un día antes de su muerte en 1991. Pero sí aborda durante todo el metraje otro episodio poco conocido: su amor de juventud con Mary Austen antes de convertirse en icono gay.

A Austen, con la que estuvo siete años, le dedicó varias canciones como “Love of my life”. Su amiga ejerció como uno de sus principales apoyos (es la única que conoce dónde fueron esparcidas sus cenizas) y Freddie Mercury le designó heredera de parte de su fortuna.

“Creo que eran un imán el uno para el otro y eran capaces de encontrar esta luz entre ellos. La clase de amor que tenían parecía aparentemente indestructible pero cuando Freddie sale del armario antes de que cortaran, la relación se convierte en algo más. Se ve cómo se protegen el uno al otro y esto sucede a lo largo de toda su vida”, señala Lucy Boynton (Asesinato en el Orient Express) en el papel de Mary Austen, que ha preferido permanecer completamente al margen del rodaje del filme.

Carismático, excesivo y genial, más de 25 años después de su muerte la vida del cantante que se transformó en leyenda sigue levantando pasiones, incluso entre las nuevas generaciones que han descubierto los míticos temas de Queen en la red.

“Son canciones eléctricas. La gente puede participar al margen del idioma, ¿quién no ha batido palmas alguna vez al ritmo de “We will rock you”?, concluye Boynton.

Londres se vuelca con Queen

La capital británica se ha volcado en este revival de Freddie Mercury y Queen. Bohemian Rhapsody tuvo un multitudinario preestreno la pasada semana en el estadio de Wembley. Un homenaje al histórico concierto contra el hambre en África Live Aid (1985), que fue retransmitido en directo a 72 países y en el que la banda eclipsó con su poderío a Bob Dylan, Phil Collins, U2 o Bowie.

A la premier acudieron los fundadores del grupo Brian May y Roger Taylor que han acompañado al equipo del filme: “Creo que a la gente le va a encantar. Muchas personas que ya han visto la película se han emocionado en el buen sentido porque hay muy buenos sentimientos”, aseguraba el guitarrista May.

Antes, los protagonistas de la cinta encendieron junto a los integrantes de Queen, el primer alumbrado temático de la banda en la mítica Carnaby Street, considerada epicentro de la cultura pop en los años 60. Las luces de navidad de la conocida calle londinense incluyen fragmentos de las letras más famosas del grupo.